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lunes, 21 de diciembre de 2009

Por primera vez, yo deje de esperar a la suerte, deje de esperar que la vida me haga un regalo. Aprendí que la suerte se hace cuando uno lucha por lo que quiere. Desde que aprendi a luchar por lo que quiero, mi suerte cambio, y ahora ya no espero más una limosna de la vida, ahora yo hago mi suerte

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