.

martes, 30 de noviembre de 2010

No me despiertes cuando vengas Y no me hables al oído Ya no me sirven tus palabras Apague el sueño
demasiado temprano Deje una carta en la mesa Con muy poca lucidez Pero el amor no se olvida Toda
mi vida rendida a tus pies Hay momentos que no recuerdo nada Hay momentos que no puedo olvidar
Hay momentos que por las madrugadas Me arrepiento y empiezo a temblar Cinco segundos de gracia
Y mil horas sin razón Sequé mis lágrimas en espejos fríos soy la sombra de ayer

No hay comentarios:

Publicar un comentario